¿Maduro? Sistema activo de columna MAUI 11 G2 de LD Systems

He aquí la versión abreviada de la introducción a este texto: Con el sistema de columna MAUI 11 G2, LD Systems lanza la segunda generación del MAUI 11 a la carrera de competición, dentro del reñido mercado de los sistemas compactos de columnas. Ahora la versión extendida: No suelo beber vino, pero de vez en cuando me gusta utilizar la metáfora del vino añejo. ¿Por qué? Porque en cada cosecha de vinos siempre se comenta que no todas las añadas son igualmente buenas para que el vino envejezca durante un largo periodo de tiempo. En términos generales, se podría decir que el vino debe ser, en esencia, capaz de salir airoso por sí mismo del largo periodo de maduración. Para ello debe contar con las mejores condiciones previas. Si esto no se cumple, se obtendrá un vino viejo, sí, pero no añejo. Se dice que un vino añejo ya cuenta con buenas propiedades inherentes antes de comenzar el proceso de envejecimiento. En la bodega del fabricante o del cliente, una maduración y un tratamiento correctos le añaden nuevas propiedades que lo hacen aún mejor, más añejo. Y lo mismo sucede con algunos clásicos del hardware de la tecnología del sonido: existen varias generaciones del aparato, cuyas pequeñas modificaciones lo elevan, de generación en generación, a nuevos niveles de madurez y calidad sin que por ello pierda las características de su versión original. Pensemos solo en las diversas modificaciones del compresor 1176, del sintetizador DX7 FM de Yamaha, del Shure SM 57 y 58 o… (en la evolución del motor de Harley Davidson, la redacción). Volviendo al tema, y con ello al inicio de esta introducción: Con el sistema de columna MAUI 11 G2, LD Systems lanza la segunda generación del MAUI 11 a la carrera de competición, dentro del reñido mercado de los sistemas de columna compactos. Veamos si maduro es igual a bueno.

Cuando tras el MAUI 28 Adam Hall presentó en 2013 el MAUI 11 más pequeño de su marca propia LD Systems, los clientes aceptaron rápidamente este sistema, no solo por ser compacto sino también por tener un precio mucho más económico en comparación con el de la empresa rival estadounidense Bose (lo sentimos Donald, la redacción). Entre el grupo de clientes, están los solistas, el sector de eventos y los DJ (como sonorización de fondo para lugares pequeños). Mi esposa y yo también utilizamos el MAUI 11 continuamente en multitud de bodas en iglesias. Poco tiempo después, los desarrolladores de LD Systems añadieron el MAUI 11 Mix, equipado con una mesa de mezclas de tres canales. A la característica línea de entrada del MAUI 11 se le agregaron una entrada MP3/Hi-Z y otra para el micrófono, cada una dotada con su propio regulador de volumen. Además, el MAUI 11 y el MAUI 11 Mix contaban con un equipamiento de 2 woofers de 6,5” para los bajos, 8 altavoces de 3” para los tonos medios y otro de 1” para los agudos. El resultado del nombre viene dado por esa cifra 11, que simple y llanamente se corresponde a la suma de cada altavoz. El MAUI 11 (Mix) puede desmontarse en dos piezas: columna y subwoofer. Su sistema de conexión permite un montaje rápido y sin cables.

”La 2ª”
La segunda generación del MAUI 11 dispone de algunas mejoras: ahora la columna se compone de solo dos piezas, que también pueden conectarse entre sí sin cables. El subwoofer cuenta con tres altavoces de 6,5” en vez de dos.

También emplea dos tweeters de neodimio de 1”, cuando antes solo había uno. Ahora, la suma arroja 13 componentes de altavoces en lugar de 11, lo cual, sin embargo, no modifica en absoluto la denominación de tipo: MAUI 11 G2. El amplificador también abarca algunos cambios: en vez de contar con una potencia de 340 vatios RMS, esta segunda generación tiene ahora 500 vatios RMS repartidos en 300 vatios para los bajos, 150 vatios para los tonos medios y otros 50 vatios para los agudos. En la primera generación, la potencia nominal del amplificador se repartía entre los tres campos así: 200/70/70 vatios. A fin de cuentas, también hay que alimentar los altavoces adicionales y algo más de potencia en los graves nunca viene mal.

Como es habitual, un DSP desempeña su función interna y se ocupa de que el MAUI 11 G2 no se sobrecargue y de que la banda ancha de los sonidos reproducidos se reparta de forma óptima por los altavoces. Esto se logra mediante un limitador multibanda (de tres bandas). Además, la duración está determinada para que todos los componentes puedan emitir el sonido al mismo tiempo y no se produzca ningún problema en las fases.

Datos clave: 24 bits y 48 kHz con una relación señal/ruido de 100 dB.

Otra novedad es que el MAUI 11 G2 dispone de un modo estéreo. Esto permite conectar fuentes de señales en estéreo, tanto en reproductores MP3 como en teclados o reproductores con entrada Cinch. En la salida del sistema se conecta un segundo MAUI 11 G2 y se activa el modo estéreo; de esta manera, las señales conectadas ya no emiten la suma de los sonidos mono, sino que los reparten por ambos lados.

¿Qué más ha cambiado? El MAUI 11 G2 ofrece la opción de colocar la parte superior separada del subwoofer o montarla en la pared. Para ello, LD Systems ofrece en sus accesorios el material de sujeción o soporte correspondientes. Independientemente del montaje del sistema activo de columna, el sistema carga los ajustes predeterminados en el DSP para garantizar el mejor sonido posible. El indicador situado en la parte superior del subwoofer muestra en qué modo de funcionamiento se encuentra el DSP en ese momento (si en montaje pared/soporte o en montaje subwoofer). Como es habitual, el nivel principal y secundario pueden regularse de forma separada entre sí.

En la parte inferior trasera está el panel de conexiones: micrófono (conector Combo XLR), línea (2 conectores Combo, 1 conector Cinch), Hi-Z (conector), MP3/Bluetooth (conector de 3,5 mm) y el sistema de salida (XLR). Los lectores atentos cuentan con seis posibilidades de conexión en cuatro entradas, que pueden utilizarse simultáneamente. En el caso de la entrada de la línea, las fuentes conectadas mediante conectores Cinch o Combo se reparten un regulador, y hay que ajustar los niveles de los reproductores.

Lo mismo ocurre al conectar un reproductor MP3 en la entrada del conector de 3,5 mm o un teléfono móvil a Bluetooth. En determinadas circunstancias, incluso una pequeña banda acústica encuentra su espacio para dar un concierto íntimo sin necesidad de una mesa de mezclas. A propósito, la versión implementada para el Bluetooth es la 4.0, aunque sin el códec de audio AptX que suena ”mejor”.

¿Qué más nos queda? La disposición de los altavoces en el subwoofer es interesante. Mientras que la primera generación colocaba sus dos subwoofers de 6,5” en forma de V (las membranas de los altavoces quedaban inclinadas entre sí), en la segunda generación están montados uno debajo de otro en línea, enmarcados por dos aberturas Bass Reflex, una situada en la parte superior izquierda y otra en la parte inferior derecha.

Todo ello sin que el subwoofer pierda sus compactas dimensiones. Hay un filtro pasabajos fijamente integrado en el canal del micrófono para impedir que se produzcan ruidos sordos. LD Systems indica un ángulo de dispersión de sistema de 120º x 20º. Por ello, ya con un solo MAUI puede sonorizarse una zona amplia, además de partes del escenario si fuera necesario. En determinadas circunstancias esto permite poder renunciar por completo a monitores convencionales o, al menos, reducir gastos.

Conectado
Lo primero que llama la atención son estos graves ahora más potentes. En el caso de algunas canciones del reproductor, a mí me parece casi un poco excesivo, pero esto no representa ningún problema ya que el nivel del subwoofer se regula aparte. Los agudos suenan algo más agradables (más presentes, más acentuados) que los de la generación 1. Esto se nota especialmente en las distancias cortas. Al caminar por el lugar, se aprecia que el sonido se reparte bien por el espacio. La inteligibilidad oral tiene un efecto especialmente bueno. Mediante una conexión Bluetooth puede montarse una pequeña configuración Entertainer en cuestión de segundos. Simplemente colocar el subwoofer, enchufar el módulo superior, conectar el micrófono, pulsar el botón Bluetooth, vincular  el móvil, y listo. A mí personalmente me hubiera gustado más que la posición del botón del Bluetooth estuviera en la parte superior del subwoofer. Cuando se trata de escenarios pequeños o bares, el MAUI 11 siempre se coloca en una esquina o delante de una pared, lo que dificulta su acceso. Por otro lado, la posición de la parte trasera impide que los oyentes puedan sentirse llamados a actuar como auténticos DJ en el entorno de la instalación.

También puede suceder que la conexión Bluetooth se interrumpa y haya que volver a restaurarla. En este caso, hay 90 segundos de tiempo para restablecer el emparejamiento, ya que de lo contrario el módulo se desactivaría. Una limitación que he encontrado es que no se ha pensado en la alimentación fantasma para un micrófono condensador, y me pregunto por qué no se ha hecho.

La prueba realizada con un Shure SM58 y mi Sennheiser E945 ha puesto de manifiesto que apenas hay nada criticable, cuando pienso en la buena relación precio-calidad. El teclado Korg PAS00 tampoco da argumentos para discutir. Si el oyente o el músico están directamente situados al lado del MAUI, la reproducción de los agudos suena optimizada. En las distancias cortas, la generación anterior mostraba una debilidad en los agudos, por lo cual solo estaba condicionada a ser utilizada para los monitores simultáneos de los músicos.

Final
Siempre hay algo que ”mejorar”, y así lo demuestra la segunda generación de la serie MAUI 11 de LD Systems: un poco más de graves, un nivel de presión acústica más alto, agudos más suaves y modernas posibilidades de conexión que ponen en valor al MAUI 11 G2 de forma significativa. Lo bueno es que su precio de 699 € no supone un gran aumento. El moderado incremento del precio se debe al valor añadido que ofrece y es perfectamente adecuado. Las escuelas, los centros juveniles, las parroquias, los DJ, los solistas y las bandas de música pequeñas (con sistema estéreo) se lo agradecerán como compradores. En cualquier caso, es un competidor que puede medirse de igual a igual con otros, como los habituales rivales de las empresas Bose y HK Audio.