Focos DTW de Cameo

Un nuevo grupo de focos lleva la denominación suplementaria DTW. ¿Qué hay detrás de esta sigla?

DTW significa «Dim-to-Warm». Esta tecnología simula con luces LED el comportamiento de las lámparas halógenas que, al atenuarlas, difunden una luz cada vez más cálida. Pero ¿por qué se necesita realmente cambiar la temperatura del color al atenuar la luz? Una pregunta justificada, porque a veces no interesa cambiar la temperatura del color. Primero, veremos por qué la temperatura del color debería hacerse más cálida conforme se atenúa la luz. Para ello, echaremos un vistazo a un sistema de iluminación convencional: la lámpara halógena.

Lámparas halógenas
La lámpara halógena posee un filamento de tungsteno que emite luz incandescente mediante el flujo de corriente, siendo comparable a un herrero que trabaja su acero hasta la incandescencia. Cuando el acero se enfría, se ilumina, comenzado por el blanco incandescente, que cada vez luce menos, hasta que solo pueden verse como unas ascuas rojas. Así es como se comporta una lámpara halógena o de uso general. Cuanta menos corriente fluya a través del filamento de tungsteno, más frío estará el metal y menos proporción de azul se generará, de manera que predominará la irradiación de calor en tonos rojizos. Al reducir la intensidad de la luz, el color de la luz se dirige siempre hacia los tonos rojizos. Este efecto también se conoce como «redshift», es decir, un desplazamiento hacia el rojo.

Otro efecto de la lámpara halógena es la lentitud del metal en enfriarse. Dado que al apagar la corriente eléctrica el filamento de tungsteno sigue estando caliente, primero deberá enfriarse para poder dejar de emitir luz. Al realizar el apagado, vemos cómo con el cambio de color hacia el rojo también se reduce el brillo, pero solo de manera gradual. Este retardo se conoce como el «tiempo de respuesta» (response time), es decir, el tiempo de reacción desde el momento de pulsar el apagado hasta la desaparición completa de la luz.

Filamentos de tungsteno incandescentes en una lámpara halógena

El espectro luminoso de una lámpara halógena: incremento continuo hasta llegar al rojo.

Tiempo de respuesta
Con la introducción del LED como sistema de iluminación, se pueden encender y apagar las luces sin que se produzca ningún tiempo de espera: el LED reacciona inmediatamente y con toda la intensidad luminosa. Un apagón repentino puede crear un efecto inmediato y de gran intensidad dramática. Por otro lado, a la hora de encender las luces, ya no se necesita un tiempo de precalentamiento, como sucede con la lenta lámpara halógena, para que se pongan a lucir rápidamente.
Cuando se usan focos LED junto con focos halógenos, la intención suele ser que los dos tipos de focos presenten un comportamiento razonablemente homogéneo. Por este motivo, los focos DTW de Cameo permiten cambiar el tiempo de respuesta entre el comportamiento halógeno y el comportamiento LED. De esa forma, al apagar se realiza una atenuación retardada. Algunos atenuadores de instalaciones también presentan una función de Tiempo de respuesta para compensar las diferencias temporales entre los equipos de potencia reducida, como los focos halógenos de 650 W, y por ejemplo las luces halógenas de 5 kW.

Al contrario que el tiempo de mezclado de una consola de iluminación, la función de Tiempo de respuesta en una lámpara funciona siempre, incluso si se pulsa el botón de destellos (Flash) en la consola o se produce un apagón repentino. La lámpara siempre se enciende o se apaga suavemente.
Redshift
A diferencia de una lámpara halógena, en un foco LED se mantiene una temperatura de color constante. Esto resulta ventajoso cuando, por ejemplo, se realizan tomas con una cámara, ya que los sensores de la cámara reaccionan con gran intensidad a un cambio de temperatura del color hacia el rojo, y con lámparas halógenas muy atenuadas producen una imagen más rojiza de lo deseado. Sin embargo, nuestros ojos siempre interpretarán favorablemente esta luz como un blanco cálido y agradable. Precisamente por esta característica, suele interesar atenuar las lámparas halógenas para crear un ambiente más cálido. Por el contrario, un foco LED no generaría de por sí una luz más cálida al atenuarlo: en este caso, habrá que hacer un gran esfuerzo mezclando focos LED rojos o ámbar para lograr que, al atenuar la luz, el color de esta se haga más rojizo o cálido.

Con la función Redshift, la temperatura del color siempre se hará más cálida o más roja con el atenuador. Los focos Cameo con el complemento DTW (Dim-to-Warm) incluyen esta función.